Leonard Sax. Educación y familia. Madrid: Ediciones Palabra, 2017
Leonard Sax ha trabajado durante más de 25 años como médico de familia, y también como psicólogo, en Estados Unidos, y ha vivido en primera persona los cambios culturales ocurridos en ese periodo. En los últimos años, además, ha recorrido el mundo entrevistándose con niños, padres y profesores y compartiendo sus experiencias.
El punto clave de sus reflexiones –y del contenido del libro– es el gran cambio experimentado en la cultura educativa en Occi-dente, especialmente en Estados Unidos, pero que se refleja en mayor o menor grado en Europa y, por supuesto, en España, y que resume como la transferencia de la autoridad de los padres a los hijos y a su entorno social. El título del capítulo introducto-rio lo resumen bien: «Padres a la deriva».
Muchos padres se sienten inseguros sobre cuál es su papel como educadores de sus hijos. Los jóvenes, e incluso los niños, buscan la validación en sus amigos, en los grupos de iguales, en las redes sociales, en las series de televisión, y no en lo que ven en su casa o les enseña la familia. Por un mal entendido miedo a parecer dictadores, muchos padres abdican de su autoridad. Desapa-rece la relación padres-hijos. Los hijos dejan de tener reglas claras sobre lo que está bien y mal, y la consecuencia de ello son unos hijos consentidos, irresponsables e inmaduros. Las primeras víctimas son ellos mismos, los hijos. Así se titulan algunos de los capítulos que integran la primera parte del libro, muy directamente relacionados con ese colapso de la autoridad: «¿Por qué hay tantos niños obesos?», «¿Por qué hay tantos niños medicados?», «¿Por qué los estudiantes se están quedando rezagados?», «¿Por qué hay tantos niños tan frágiles?»... No es difícil advertir que ése es el perfil mayoritario de los niños y jóvenes que vemos en nuestras consultas, para los que muchas veces se buscan soluciones farmacológicas. Analizando aspectos como dónde comen, cuánto comen, cuánto duermen o en qué ocupan su tiempo libre, el autor va mostrando con ejemplos extraídos de su propia experiencia las consecuencias de «abdicar ante la dictadura de las redes y de la presión social».
El colapso de la autoridad no es un libro de autoayuda, ni un vademécum de soluciones para padres y pediatras desconcerta-dos. En la segunda parte del libro, «Soluciones», también fundamentada en su experiencia profesional, el autor apunta estrate-gias sencillas para volver a recuperar el sentido de la educación. No me resisto a citar algunos de los títulos de capítulos de esta segunda parte: «Lo primero, enséñale a ser humilde», «Lo segundo, disfrutar», «Tercero, el sentido de la vida»... Algunas de las recomendaciones que propone no son fáciles de llevar a la práctica, a pesar de su simplicidad (pensemos, por ejemplo, en la de prohibir en casa algunos videojuegos, denominados first-person shooter, como Grand Theft Auto o Call of Duty), pero probable-mente coincidan con la forma tradicional de abordar los problemas en medicina: ir a la raíz.
En una pediatría en la que los problemas de los niños cada vez tienen más que ver con los hábitos sociales y las circunstancias familiares que con las enfermedades en sí mismas (pensemos, por ejemplo, en muchas patologías infecciosas), los pediatras tam-bién necesitamos una puesta al día. La labor de prevención y promoción de la salud requiere conocimientos y capacidad de con-sejo. Creo que este ensayo, sencillo de leer y bien documentado, puede ser de utilidad.
J.M. Moreno Villares
Pediatra. Subdirector de Acta Pediátrica Española
Pediatra. Subdirector de Acta Pediátrica Española