Sr. Director:
El proceso ateromatoso comienza en la infancia y su progresión depende de factores genéticos y ambientales1,2.
Entre los factores de riesgo susceptibles de intervención preventiva se encuentra la hipercolesterolemia3,4.
El objetivo es valorar la importancia de las distintas variables para la identificación de las hipercolesterolemias en la infancia.
Estudio descriptivo transversal, cuya población objeto de estudio fueron todos los niños de 2-15 años de edad con analÃtica de colesterol (n= 189). Se recogieron las siguientes variables: sexo, edad, diagnóstico o no de dislipemia en los progenitores y obesidad. Para el análisis univariante se emplearon proporciones y medias, éstas con su correspondiente desviación estándar, y para el multivariante el análisis de regresión logÃstica con su correspondiente odds ratio (OR).
El 50,8% era de sexo masculino, con una media de edad de 10,8 ± 3,2 años. El 28,6% estaba diagnosticado de hipercolesterolemia. El 9,5% tenÃa dislipemias primarias (el 4,8% una hiperlipidemia familiar combinada, el 3,2% una hipercolesterolemia poligénica y el 1,6% una hipercolesterolemia familiar heterocigota). TenÃa antecedentes de obesidad el 11,1%. La concentración media de colesterol total en los niños dislipémicos fue de 218 ± 19 mg/dL y la de cLDL de 137 ± 24 mg/dL. La OR fue de 59,7 en los niños con antecedentes de hipercolesterolemias familiares y de 3 en los que presentaban obesidad.
Los antecedentes familiares de hipercolesterolemia son los que tienen mayor importancia relativa en la detección de niños dislipémicos y en la detección de hipercolesterolemias primarias.
La identificación de niños afectados por dislipemias de causa genética es prioritaria en los primeros años de vida5.
No hay suficientes evidencias cientÃficas para recomendar el cribado universal del colesterol en niños. Se debe realizar en niños y adolescentes con una historia familiar de hipercolesterolemia6; en cualquier caso, el pediatra debe valorar la realización de un cribado cuando existen otros factores de riesgo, como la obesidad7, el sedentarismo y la hipertensión arterial8.
BibliografÃa
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7. Bayle M, Sánchez M, Peláez MJ, González A, Martinoli C, DÃaz A. Relación entre el perfil lipÃdico y el Ãndice de masa corporal. Seguimiento de los 6 a los 11 años. Estudio Rivas-Vaciamadrid. An Pediatr (Barc). 2006; 65(3): 229-233.
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