Resumen
La investigación es un proceso sistemático que se lleva a cabo en cuatro grandes etapas: conceptual, empírica, interpretativa y comunicativa. El protocolo de investigación es el documento que nos permite pasar de la concepción de un problema de investigación a su puesta en marcha, por lo que se enmarca en la etapa conceptual de la investigación y su finalización coincide con el inicio de la etapa empírica o práctica. Su función es comunicar con el máximo detalle, precisión y claridad todos los aspectos relacionados con el estudio que se plantea, para su posterior evaluación por parte del organismo de investigación competente.
Este artículo, en el que se describe cuál es la estructura de un protocolo, qué apartados lo componen y cómo debe elaborarse, pretende servir de guía orientativa para todos los profesionales de pediatría interesados en planificar y realizar una investigación científica.